26 Ago «LA IMPORTANCIA DE LA MEDITACIÓN»
«La realidad tan solo aparece cuando la mente está en calma, no forzada a la calma»
Jiddu Krishnamurti
¿Te has preguntado en alguna ocasión, por qué persisten los conflictos en los seres humanos? ¿Por qué a pesar de “tantos” años de evolución y práctica, por así decirlo, las personas siguen sin poder percibir el sentido de la vida?
El miedo, las inseguridades, la culpa, el descontento, la ira, y demás estados emocionales, parecieran ser el pan de cada día para el humano promedio, pero, ¿por qué? ¿Por qué el ser humano, a pesar de considerarse un ser superior a las demás especies, es el único que vive en conflicto, pelea y desilusión? ¿Acaso hemos olvidado algo que los demás seres vivos tienen muy presente? Y si esa fuera la cuestión, ¿qué es lo que hemos olvidado?
Es evidente la necesidad de un cambio social, sin embargo, ello no significa que la solución se encuentre en la sociedad como tal, es decir “allá afuera”, si no más bien significa que debemos mirar lo que conforma o da vida a la sociedad, en otras palabras, ¡el individuo! Solo responsabilizándonos cada uno como el individuo formador de sociedades que somos, es que daremos pie a una transformación verdadera y radical, pues nos estaremos involucrando plenamente en las causas, en vez de solo entretenernos con los efectos.
Al referirme a trabajar desde el individuo, no me refiero a nombrar acciones específicas que el individuo tendría que realizar de manera externa, sino más bien a indagaciones exhaustivas internas. Es decir, llevar a cabo una observación tan plena y entregada que dé paso a un autoconocimiento total, en donde absolutamente encontraremos aquello que hasta el momento nos hemos dedicado a olvidar.
El olvido y a la vez descuido de nuestra esencia, ha sido causado por dirigir frenéticamente nuestra atención al exterior, buscando desde la ignorancia que alguien más se haga cargo de nuestro bienestar para así poder hablar después de una culpabilidad digna de señalar, una vez que las demandas creadas desde el propio ego, no sean solventadas satisfactoriamente según la versión de dicho ruido mental.
Es momento de reconocer que somos los únicos responsables de lo que llamamos “realidad”, que, hablando claro, no es la realidad absoluta, más bien es una pseudorealidad que inconscientemente nos hemos inventado y hemos vestido a la vida con dicho disfraz. Por ende, solo nosotros podemos quitarlo.
Para poder retirar el disfraz y dar paso a la claridad, no hay otro camino más que el de difuminar el ruido mental, pues es lo único que nos aleja de experimentar la verdad. Este ruido mental, estoy segura que te es familiar, pues es esa vocecita que muchas veces (por no decir todas) se las ha arreglado para poderte sabotear. Es tan ágil que ha sabido convertirse en tu estilo de vida, de tal modo que, al día de hoy no puedas ver más allá de dicho cristal. Pero bueno, resaltemos que todo es perfecto y nada es casualidad, si ahora estás leyendo esto, entonces es porque estás listo para salir de este bucle y emprender la solución retomando la autoobservación para dar paso a la consciencia interior.
Pues bien, la consciencia solo puede crecer al permanecer en un estado de meditación, pues al meditar estás en silencio y es en el silencio donde crece la consciencia.
Al meditar, no puedes evitar ayudar, de hecho, es lo único que estás haciendo, pues te estás responsabilizando de tu sentir, de la construcción mental que has hecho de ti. Al hacerte cargo de ello, el velo que nubla tu visión empieza a caer, has hecho lo único que se te ha pedido para recibir la magnificencia y armonía de la vida, no porque antes se te negara, sino porque tú mismo te la negabas. Desde esta posición, desde una mente en calma y conectada con la esencia de todo, comúnmente llamada “Dios”, es que la perfección que existe aquí y ahora, puede ser honrada y es entonces que vives desde tu verdadero ser. Eso, es lo más hermoso y valiente que puedes hacer por ti y por la vida, ya que, aunque pueda sonar un tanto exagerado, al hacerte responsable de tu propio conflicto, dolor e invención, das paso a la sanación interior, para después compartirla y trascender hacia el exterior.
¿Qué puede ser más hermoso que esto? Saber que podemos elevar la consciencia del mundo y no dudar en hacerlo, pienso que es nuestra misión, independientemente de a lo que nos dediquemos a nivel de acción, podemos realizar todo manteniendo una profunda conexión.
Cabe mencionar que la meditación no es específicamente permanecer en la posición de flor de loto, en un cuarto donde nadie te moleste y haya absoluto silencio exterior, no. La meditación va más allá de cualquier práctica mecánica, basada en pasos específicos o diferentes niveles. La meditación es simplemente mantener tu mente alerta en el presente, en donde descubres que ninguna película mental que te puedas contar, es digna de suplir la maravilla de permanecer en la eternidad, aquí y ahora, reconociendo que este instante es lo único real.
Te platico: Meditar es una práctica que hago a diario, para mí, al día de hoy es como respirar. Y algo que me ayudó mucho en ello, siendo una guía tangible en mi avance hacia la quietud mental, fue una banda sensorial, la cual detecta tu frecuencia cerebral (ondas cerebrales) en tiempo real, traduciendo tu actividad mental en sonidos orientadores (los sonidos son de la naturaleza o clima, tales como lluvia, playa, bosque, etc) siendo un gran apoyo para encontrar la calma y mantenerte enfocado.
Dicha banda sensorial que te recomiendo se llama MUSE S, enseguida te dejo el link por si deseas adquirirla.
Atrévete a vivirlo, atrévete a ser parte consciente de tu evolución individual, generando un impacto benéfico social y, sin duda, hasta universal. Verás cómo tu liberación interna es suficiente para manifestar ese cambio radical que necesita la sociedad.
Como siempre lo menciono, gracias por ser parte, gracias por estar.
Antes de terminar, y como complemento de este artículo, te comparto una entrevista que me realizaron, específicamente sobre “El poder de la meditación” en nuestro día a día. El siguiente link te llevará directamente a mi canal de YouTube, en donde periódicamente encontrarás contenido de valor que te sea de apoyo en tu despertar espiritual. ¡También te invito a suscribirte!
Paz y amor infinitas de mi parte,
Stephanie Banda
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